DECORAR CON CALABAZAS
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Ya hemos hablado de la importancia del color en todo lo relacionado con la celebración de Halloween. Negro y naranja son los colores emblema, aunque el rojo tiene también su sitio, aunque sea en forma de ojos diabólicos y gotas de sangre.
El negro aparece en gatos, brujas, ataúdes, murciélagos, en general, todo lo macabro o espeluznante.
El naranja pone el contrapunto. Y fundamental en cuanto a la parte naranja de Halloween, las calabazas.
Están por todas partes: en el colorido, que para eso son básicamente naranjas, en las “jack-o-lanterns”, esas calabazas huecas y con caras talladas que contienen velas o bombillas y se suelen ver en las ventanas, en guirnaldas, arreglos de mesa, etc.
Todo
tipo de calabazas, grandes, pequeñas y diminutas, redondas, ovaladas, alargadas,
¡y hasta nabos! En realidad, no hay reglas fijas: tu imaginación es el límite.
Pero
las calabazas, ni están sujetas al color naranja, ni han de tener siempre ese
toque siniestro-infantil. Sin perder el espíritu de Halloween, pueden resultar
sumamente elegantes y refinadas, o acogedoras y hogareñas:
Hay
muchos detalles “calabaceros” que puedes incluír en tu Halloween, como estos
paquetitos de caramelos en forma de calabaza.
Nota
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